También se acordó el estado de movilización y asamblea permanente en cada uno de los organismos e instituciones educativas que dependen de Regímenes Especiales.
Desde el Ministerio de Educación aseguran que la Dirección de Regímenes Especiales dejará de existir pero que los servicios que presta seguirán funcionando, sin embargo, la medida carce de fundamento y no tiene demaciado sentido cerrar para continuar.
La calidad de la gestión de la Dirección General de Regímenes Especiales es reconocidad por toda su comunidad educativa, por los óptimos resultados, a pesar del escaso o nulo apoyo de equipamiento dado por Ministerio de Educación a sus instituciones.La Dirección cumple con creces sus finalidades desde su creación, su impacto se extiende a todos los niveles y modalidades del sistema educativo, ofrece a cada niño, joven u adulto los apoyos necesarios para el aprendizaje y la participación en propuestas educativas acorde a sus necesidades, por lo que la medida de disolución carece de razonabilidad, por ello, todos los docentes y personas comprometidas con la educación debemos rechazar.

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